
El número superará el millar si se suman más del plan de estabilidad con el que se persigue reducir al 8% la tasa de temporalidad
Para ello, las centrales cifran en 5.000 las plazas que en el sector docente extremeño deberán salir a concurso en los próximos 5 años, alternando las oposiciones de profesores y maestros. Motivo por el que creen conveniente que en las próximas oposiciones se sume ya a las 800 iniciales un porcentaje del citado plan, con el fin de comenzar a reducir la temporalidad. No en vano, la región tiene a día de hoy casi 2.000 interinos trabajando durante el curso completo.
La negociación con Educación sobre las próximas oposiciones comenzará este viernes. Es el día fijado para una primera reunión en la que se tratarán de decidir las especialidades que saldrán a concurso. Una decisión que los interinos llevan tiempo esperando y que los sindicatos han reclamado con insistencia en las últimas semanas, con el fin de que cuanto antes los afectados sepan si tienen o no que estudiar para hacer frente a un proceso selectivo.
Nota indefinida
La negociación, según las previsiones comunicadas por la Consejería de Educación a los representantes sindicales, continuará con una segunda reunión la próxima semana, con el objetivo ya de cerrar el número de plazas y la totalidad de especialidades que saldrán a concurso. Las centrales confían en que para entonces se sepa ya si se mantiene por un lado el 100% de tasa de reposición o se elimina y, por otro, si se suman o no plazas del plan de estabilidad a la convocatoria prevista para junio.
Por otro lado, tal como se acordó este martes en la mesa técnica que tuvo lugar, la consejería analizará la opción desde el punto de vista jurídico de sacar una resolución que establezca que, de cara a la próxima oposición, los interinos podrán mantener su nota, no caducará por tanto, hasta que entre en vigor el nuevo decreto de interinos, que los sindicatos quieren que recoja que la nota será, para todos los cuerpos, indefinida.
Esta es una de las cuestiones más conflictivas del nuevo decreto de interinos que comenzó a negociarse antes del verano. Junto a ella, la zonificación que reclaman las centrales y la rebaremación que también demandan.